Debe ser la chica que todos sacan a bailar

Sintonice tu presencia y nunca te pude sacar a bailar.
El miedo fueron lentes que me ayudaron a mirarte.
El silencio fue una excusa para poder sentirme bien.
Mares de cumbias y cuartetos te traían sin anestesias,
con una botella que siempre escribe el mensaje.

Te miraba e imaginaba estas lineas,
dignas de un buen cobarde,
dispuesto a dar nada y recibir todo.
Te miraba y deseaba el fin,
deseaba que mi ignorancia se sacuda,
como tu risa en la pista.

Ni un paso,
ni una simple alegría,
ni lo mínimo para creer.
Todo lo mio estaba afuera,
donde juego de local,
y gano por penales.